Le venían siguiendo los pasos desde Santiago, ya que pertenecía a una organización criminal que se dedicaba a explotar el tráfico ilícito de personas, se trata de un ciudadano colombiano dedicado a explotara los migrantes que intentaban entrar o salir país a cambio de gruesas sumas de dinero.
El individuo, acostumbrado a la ilegalidad, permanecía camuflado como socio activo en la toma de terrenos emplazada en el sector de la “Villa Eben Ezer”, ubicada a un costado de la ruta 11-CH, Valle de Lluta, hasta donde llegó el largo brazo de la ley.
Junto con sus actividades en la toma, formaba parte activa de una estructura criminal, dedicada a ingresar y sacar del país a personas indocumentadas por pasos clandestinos. El “coyote” pertenecía a una banda cuyo líder es un haitiano que se encuentra procesado en Santiago. El detenido por la PDI se movilizaba por distintos sectores de la ciudad para captar a ilegales que necesitaban traspasar la frontera por pasos clandestinos.
Para ello gestionaba documentación con permisos y pasajes a extranjeros ilegales que se dirigieran hacia la capital, agregando una labor logística en que los trasladaba en vehículos, eludiendo el control policial y migratorio, cobrando por esto cuantiosas sumas en dinero a los usuarios por este negocio ilegal. Es por ello que en conocimiento de estos antecedentes los oficiales a cargo del procedimiento, gestionaron con el 7° Juzgado de Garantía de Santiago la orden de entrada y registro al inmueble donde habitaba el imputado, procediendo a su detención e incautación de instrumentos que utilizaba para efectos del delito.