La diligencia sobre narcotráfico en realidad no fue un “golpe mortal” a la droga, más bien fue un intento de emprendimiento que aterrizó apenas emprendía vuelo. Se incautaron empanadas y sopaipillas de marihuana, casi tres litros de cannabis liquida, 133 mil pesos en efectivo y dos involucrados con arresto domicilio mientras se investiga el caso.
La nota se inscribe entre las rarezas en la lucha contra el microtráfico en pandemia y en la imaginación para los emprendimientos ilícitos. Para llegar a los autores fue necesario el trabajo de un agente encubierto, quien se contactó con una red de whassapp donde se ofrecían bocadillos “que se van volando al comerlos, 2 por $ 6.500, puestos a domicilio”. El aviso fue la perdición.