En un edificio en construcción de avenida Ignacio de Loyola vigilantes encontraron el cadáver de un hombre presumiblemente chileno de unos 35 años, baleado, sin documentos de identificación, y de inmediato llamaron a la policía. La Fiscalía instruyó a oficiales de la BH y del Lacrim la investigación de estos hechos y se constituyeron en el sitio del suceso e iniciaron las pesquisas para detener al o a los autores de este nuevo hecho de sangre que incrementa los altos índices de criminalidad en la ciudad.
Detectives de estas unidades especializadas establecieron en las primeras diligencias que en el deceso de la víctima habría intervención de terceros, ya que esta presentaba una herida con arma de fuego en la región axilar derecha.
“Estamos realizando todas las diligencias pertinentes para establecer fehacientemente las circunstancias en las que ocurrió el hecho, y lograr en primera instancia la identidad por cuanto no mantenía documentación o especies que nos permitieran hacerlo”, explicó en el sitio del suceso el jefe de la Brigada de Homicdios de la PDI Arica, subprefecto Álvaro Astroza.
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